El término dust se refiere a cualquier pequeña cantidad de monedas o tokens cuyo valor es tan bajo que no puede procesarse en transacciones dentro de la blockchain.
Por ejemplo, el dust de Bitcoin es una pequeña cantidad de Bitcoin en una billetera o dirección cuyo valor es incluso menor que la comisión necesaria para realizar una transferencia. Esto hace imposible procesar la transacción. Para evitar perder este dust en la red, es importante verificar la cantidad mínima requerida para depósitos y retiros de criptomonedas.
A veces, el término dust también se refiere a pequeñas fracciones de criptomonedas que quedan después de realizar operaciones. La mayoría de los exchanges tienen un requisito mínimo de operación, lo que significa que puede no ser posible intercambiar las pequeñas cantidades de criptomonedas que permanecen en una cuenta de exchange.
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